Cuando los propietarios del grupo Hard Rock International pusieron su objetivo en Ibiza con la idea de abrir un hotel en esta isla, sabían que solo podrían llevarlo a cabo aliándose con Palladium Hotels & Resorts, propietario de Ushuaïa. Dicho y hecho. Entre los dos han convertido los históricos Club y Hotel Don Toni de Palladium en la nueva meca ibicenca de la música en directo. Desde hace unos días Ibiza cuenta con el cinco estrellas más grande de la isla.
La experiencia para quien se aloje en el HRH Ibiza promete sensaciones fuertes, como todo en esta isla que hace de la música un catalizador de emociones donde todo gira en torno a la música y a su puesta en escena. Conciertos cada viernes de grupos importantes y muchas piezas de memorabilia, objetos personales de grandes figuras del rock repartidas por el hotel y lo último en gadgets personalizados, los cuales incluyen desde elegir las canciones que sonarán en tu habitación hasta mezclar tus propias pistas en una mesa profesional, pasando por solicitar una de las 20 guitarras Fender para que toques y grabes tu propia maqueta.
La lista de experiencias continúa con dos piscinas dotadas de altavoces subacuáticos; un Rock Spa y una ultramoderna pulsera RFID, es decir, Identificación por Radiofrecuencia, que sirve tanto para acceder a la habitación como para conectarse a las redes sociales o para pagar consumiciones. Además, es sumergible por lo que no tienes que despegarte de ella ni siquiera para disfrutar de un refrescante baño en la piscina.
En el Hard Rock Hotel Ibiza los huéspedes pueden elegir entre doce categorías de habitaciones, las estancias son espacios diáfanos con el baño integrado en el dormitorio y terrazas panorámicas; aunque las más espectaculares son las Rock Suites, de estilo loft con azotea, solarium y jacuzzi para escuchar los conciertos como un VIP. Pero sin duda, las dos habitaciones únicas son la Rock Suite Legend, un tributo a Bob Marley, o la Rock Star Suite, dedicada a David Bowie.
La gastronomía es también un punto fuerte del hotel, sobre todo en los dos restaurantes que llevan el sello de Paco Roncero. Uno es Estado Puro, la mejor de la cocina española y de la tapa evolucionada. El otro se llama Sublimotion y, más que un restaurante, se trata de un espacio conceptual que pone a prueba los sentidos y eleva la gastronomía a una nueva dimensión. En él, 24 comensales, cada noche, podrán degustar 20 platos de Roncero arropados por un espectáculo sensorial único. La lista de espera ya es larga y eso que el precio por comensal es de 1.500 euros.
Vía: Ocholeguas
Foto: Michael180
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